A medias

Foto: www.esfuerzate-eventos.com.ve
Varias definiciones. Diferentes palabras. Diversidad de opiniones. Pero una sola realidad.

A lo largo de toda edición nos dedicaremos a "hablar" sobre un tema existente, algunas veces comentado, pero no entendido, "la mediocridad" y sus consecuencias.

Como revista no pretendemos colocarnos en un lugar que no nos corresponde, sino en la de un medio que tiene como objetivo ser un "canal abierto" de aquella luz que puede y debería alumbrar esa parte de nosotros que aún permanece a semi oscuras.

Es necesario, importante y urgente que podamos comprender totalmente la "mediocridad", para así, de esta manera, tomar las decisiones oportunas y acertadas para el cambio. Porque no sirve con "diagnosticos" sino se aplica la solución que provoque el cambio.
"Mediocridad" es estar parado por un "instante" sobre un lugar "estático", ni avanzas, ni retrocedes, pero que al pasar el tiempo provoca que te alejes del estado ideal. Es haber llegado hasta tal punto y conformarse. Mediocridad es la "cama" de la comodidad.


Ahora, "mediocridad" no obliga, uno es el que toma la decisión de adherirse a ella. Uno es el que le dice "sí", o "no". Por eso que tiene que ver con la mentalidad de cada quien, depende de lo que pensamos, primero acerca de Dios, y luego de nosotros que vamos a optar o no, por dejarnos dominar por ella.

Nuestro mensaje es motivacional. Queremos que cada lector se autoevalúe y siga creciendo. Nuestro objetivo es tu "bienestar" perfecto. Porque sabemos que "plenitud" interna lleva a una vida también plena, con la felicidad como aliada; no sólo para la persona, sino para TODOS aquellos que la rodean.

Porque piensa, vas a dar y demostrar aquello que tenés dentro tuyo; siempre fue y será así, por ende el tema en cuestión no se "duerme" con vos, sino que se extiende a través tuyo y ejerce influencia a tu alrededor.

Estás preparado para cosas grandes, extendete sin límites, concentrate en lo mejor y hacia eso dirigite. Hacelo por vos, pero también por aquellos que tenés o no a cargo. Se puede. Y se debe.

Para terminar te animo a que no abrirle la puerta a la mediocridad; decile que en tu casa ya está viviendo la excelencia.

Leonardo Fioretti

Comentarios

  1. Anónimo8:42 a.m.

    me parece que mediocridad también es, quedarse llorando por cosas y casos que no puedes o no tienen solución, si no lo puedes cambiar sacudirse y levantarse del suelo es la mejor opción; ademas siempre existe la posibilidad de que si se cierran todas las puertas debes FABRICARTE UNA.

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