Navidad ¿Tiene lugar para Jesús?

Hace años, cuando la vida era mucho más tranquila que ahora, cuando la gente tenía menos computadoras y máquinas y más libertad para pensar y disfrutar de las cosas sencillas, la Noche Buena era una ocasión especial, un momento profundamente anhelado. Era la época de cantar los villancicos tradicionales, para visitar la Iglesia y para sentirse muy cerca de los seres queridos. Si había adornos, eran cositas hechas a mano o compradas por unas pocas monedas. Un regalo venía como sorpresa, no como una obligación social. Pero para la mayoría, la Noche Buena ha cambiado. Todavía significa fiesta y música, pero ahora es mucho más complicada. Exige un gasto de dinero más allá de lo prudente, los adornos son de fábrica, y la música junto con la bebida generan una emoción que llega a los niveles del frenesí, no queda tiempo para pensar, y las canciones tradicionales parecen fuera de lugar. Uno creería que la época de Navidad moderna, debido al progreso, es más feliz y llena de satisfaccion...