Bendita sociedad

Los hijos son algo especial, y en eso todos, con seguridad lo digo, estamos de acuerdo. El ser madre pone en juego principios y emociones, ambas se debaten dentro de una queriendo prevalecer..
Las emociones son motivadas por nuestros pensamientos, y dependiendo lo que pienso, será lo que vivo. Por ejemplo: Si la mayoría del tiempo piensa (Proverbios 23:7) en enfermedades, puedo asegurarle que al final del día usted sentirá dolor en alguna parte de su cuerpo, y ese dolor lo asociará con alguna enfermedad que personas conocidas o cercanas han sufrido. Parece loco verdad? Sin ir más lejos el simple hecho de enamorarse sucedió como consecuencia de pensar largo tiempo en esa persona y lo especial que esta era.
Ahora bien de acuerdo a esto podemos decir que hay pensamientos buenos y pensamientos malos, y producto de los mismos se dará como resultados estabilidad ó inestabilidad emocional. ¿Me siguen? Si vamos más allá, podemos decir que nuestros pensamientos determinan nuestras decisiones, y según lo que decidimos, actuamos, y el actuar consistentemente provoca hábitos en nuestras vidas. Deténganse en la importancia de pensar en lo que pensamos. Porque si pensamos equivocado, decidiremos hacer las cosas equivocadas y dará como consecuencia hábitos equivocados. Y eso no es nada, el tener hábitos equivocados genera opresión y frustración constante en nuestro diario vivir.

Incontables veces al día tomamos decisiones, ¿cuánto desean ustedes que esas decisiones sean las correctas? ¿cuántas de las decisiones que toman acerca de la vida de sus hijos usted desea que sean las correctas y justas? Todas, verdad? Y les diré que eso es posible. Sé que hay una realidad de que estamos en un proceso en donde aprendemos a ser padres, pero la Palabra (la Biblia) nos revela que tenemos la capacidad, la unción para ejercer la paternidad y ejercerla con éxito.
La Palabra.. La Palabra.. sólo ella hace la diferencia!!! La Palabra es el objeto de tu éxito, es la clave del éxito, miles de personas pagan sumas exorbitantes de dinero por encontrar el secreto del éxito y la felicidad para sus vidas. Y nosotros por ser hijos se nos ha revelado la verdad de la Palabra por medio del Espíritu que mora en nosotros (1ra Corintios 2:10, la Biblia).

Ahora bien, a la luz de lo que hemos venido hablando debemos concluir que es necesario, es más diría determinante, que cambiemos nuestra manera de pensar; necesitamos identificar y desechar los pensamientos equivocados que nos llevan a actuar equivocado y que resultan frustrantes para nosotros.
La Palabra nos dice en Romanos 12:2 (la Biblia) que no nos conformemos a este siglo, sino que seamos transformados por medio de la renovación de nuestro entendimiento, para comprobar la buena voluntad de Dios agradable y perfecta. Sabemos que nuestra familia es una Familia Bendita (puede leer Genésis 12:3, la Biblia), entendemos que nuestros hijos son una generación poderosa sobre esta tierra (puede leer Salmos 112:2, la Biblia) Esa es la buena voluntad de Dios agradable y perfecta para nuestras familias y nuestros hijos, ¿lo han comprobado? Para ello es necesario que su forma de pensar no sea como la forma de pensar de este tiempo, debemos transformar, cambiar, metamorfosear nuestra manera de pensar a la manera de pensar de Dios.
Mi pensamiento genera opiniones, lo que pienso es lo que creo, acerca de algo o de alguien y coherente con mi creer va a ser mi actuar, mi vivir. Entonces.. si yo pienso lo mismo que las personas que no creen la Palabra, viviré como ellas viven, y tendré los resultados que ellas tienen. Ahora déjame decirte (mi intención es ayudarte a observar) el estado de las familias en nuestra sociedad: los matrimonios felices.. escasean; los matrimonios duraderos.. escasean; familias bien constituidas.. escasean; niños contenidos.. escasean; y podríamos seguir con muchos ejemplos más. ¿Es ésta la voluntad de Dios para la vida del hombre? ¿Para la sociedad toda? ¡¡¡NO!!! ¡Claro que no! Por eso es necesario que renovemos nuestra mente con la Palabra, con la verdad que la Palabra nos revela a nuestras vidas, y así comenzaremos a pensar como Dios piensa, entonces creeremos lo mismo que Dios cree y podremos caminar en el mismo camino que el camina, y Dios camina en el éxito, Dios no conoce el fracaso, y nosotros no tenemos porqué conocerlo.
La familia es la base de la sociedad, es el núcleo primero, Familias Benditas sólo pueden dar como resultado una Sociedad Bendita.
La Palabra contiene un poder explosivo, porque tiene efectos varios metros a la redonda.. nosotros viviendo la verdad de una familia bendita y forjando una sociedad con una generación poderosa, provocaremos que muchos a nuestro alrededor conozcan esta verdad y quieran vivirla, porque el estado de las familias y los matrimonios de hoy, son producto de la ignorancia y el engaño, por eso son robados y destruidos. Pero haciendo la diferencia primero en nosotros, haremos una familia diferente, y entonces.. otras familias serán influenciadas y seremos una epidemia que hará una sociedad diferente.

Alejandra Bongiorno
[Alejandra forma parte del colegio educativo Alfa & Omega como maestra, y está a cargo del ministerio de adolescentes en la iglesia Cosecha Mundial.]